Aquí me
voy a centrar en la historia de los Giovanni, dejo atrás la famosa historia de
Caín, de su progenie (Enoch, Zillah e Irad) y de su primera y segunda
Ciudad. Vamos al grano: Allá por el año
1100, los Cappadocios convirtieron en ghouls a una familia de Venecia
(¿Adivinas de qué familia se trata?), con el fin de estar al tanto de la vida
de los mortales. Estos éramos nosotros los Giovanni que en poco tiempo se
convirtieron en los más influyentes de los ghoules Cappadocios, en parte por
nuestra habilidad económica y en parte por nuestros conocimientos sobre la
Muerte. De hecho los Giovanni ya éramos necromantes, y muy poderosos;
rivalizábamos en poder con la Casas de Hermes (sólo que nosotros enfocábamos
nuestro poder hacia la Muerte). Por este motivo los Capadoccios empezaron a
abrazar paulatinamente a más y más miembros de nuestra familia, y estos nuevos
Vástagos empezaron a utilizar una nueva disciplina Vampírica, la
Necromancia. Los Giovanni fuimos también
la causa de la creciente economía Cappadocia. Los ghoules Giovanni
controlábamos numerosas casas de comercio italianas, las cuales hacían negocios
en zonas del mundo que ni siquiera los Ventrues se atrevían a pisar. Nosotros
abrimos rutas comerciales con los árabes e incluso con los chinos; y
consecuentemente tuvimos que tratar con los peligrosos Assamitas (nunca
debieron rendirse a los Tremere de la Camarilla) y los crueles Tzimisce (de los
que aprendimos algunas divertidas formas de extraer información). Los Giovanni
hicimos nuestro movimiento, gracias a la ignorancia de Cappadocius los Giovanni
teníamos una oportunidad, (Cappadocius ignoraba a sus propios ghoules). Así en
1444, nuestro padre Augustus Giovanni, atacó y diablerizó a Cappadocius.
Gracias a este gámbito los Giovanni nos convertimos en un verdadero clan. Por supuesto como esto ocurrió al mismo
tiempo que el Sabbat y los anarquistas daban la vara, los otros clanes se
alarmaron; sobre todo los Ventrue, ya que contaban con la ayuda de Cappadocius
para establecer la Camarilla. Así que los Ventrues estaban cabreados por haber
fastidiado sus planes y pedían la cabeza de Augustus. De modo que se declaró
una "Caza de Sangre" sobre los Giovanni. Mientras tanto el Sabbat
intentaba acercarnos a sus filas, ya que nosotros al igual que los Lasombra y
los Tzimisce, diablerizamos a nuestros respectivos Sires. Pero no nos
interesaba unirnos a esa panda de rufianes (dile a un Brujah Antitribu que su
madre a insultado a su madre y seguramente la torture hasta que se pida perdón
a si misma). Los arzobispos del Sabbat también pusieron precio a nuestra cabeza
por nuestra osadía. De cualquier forma, demostramos ser más poderosos de lo que
ninguna de las dos facciones esperaba. Para más inri, el Inconnu también quería
la destrucción de nuestro glorioso clan. El poder unido de estos tres grupos no
pudo con nosotros, ya que los poderes de Necromancia hacían que las batallas se
pusieran a nuestro favor (las hordas de Wraiths y los cuerpos de zombies
reanimándose una y otra vez, son demasiado, incluso para las furiosas hordas
del sabbat). Finalmente la Camarilla y el Sabbat decidieron firmar la paz con
los Giovanni y dejarnos en paz al margen de sus disputas. Ambos aceptaron,
recordando lo poderosa que puede llegar a ser la Necromancia. Bueno, hasta aquí es la versión oficial, pero
falta lo más importante, el oscuro secreto de los Giovanni: La historia empezó
hace 3.000 años, durante los días del culto a Horus y a Isis en el antiguo
Egipto. En el principio solo estaba Horus y Mestha entre las momias, aunque el
tiempo pronto añadió a la semileyenda "Imhotep" y también otras. Una
de estas otras fue un sacerdote que se vio obsesionado con la necromancia, y
que durante el tiempo de varias vidas alcanzó el 5º nivel, perfeccionando los
hechizos disponibles y creando algunos nuevos. Por supuesto, durante el proceso
se volvió completamente loco e intentó usar sus poderes contra Horus y el
pueblo Egipcio.
Era demasiado poderoso para que se le permitiera seguir viviendo, así que Horus le venció en un duelo mágico y le transformó su KA en polvo. Su khat fue quemado y sus cenizas esparcidas en el Nilo, y Horus hizo algo que nunca había hecho antes, invocó el nivel 5º de Hekau sobre el Necromante; consiguiendo así que la realidad olvidara al Necromante. ¿Podría esto realmente matar a una momia? Los años pasaron y el Necromante no volvió a la vida, sólo Horus le recordaba. Pero la maldición de las momias es tal que ni siquiera la magia Hekau puede destruirlas. La realidad había olvidado el KA y el Khat del Necromante, pero no su Ba, ya que el Ba es eterno, y este pululaba por la Umbra. Pasaron muchos años hasta que recuperara la conciencia y muchos más hasta que recuperó su inteligencia, pero finalmente recuerdos y mágia volvieron a él encendiendo el fuego del odio. Pero no podía hacer mucho desde el mundo de los espíritus, por lo que busco un camino para volver al mundo de los vivos. Tardó hasta la Edad Media antes de que el Necromante rebautizado como Tempt-Tha (ya que ni el mismo podía recordar su nombre) tuviera una oportunidad para volver a la vida. Una reunión de Necromantes Venecianos (con todos ustedes... los ¡¡Giovanni!!) estaban invocando algún espíritu para ayudarles. Y Tempt-Tha les oyo y obedeció. Para que le ayudaran a encarnarse, les enseñó artes oscuras. Les incitó a convertirse en vampiros, de esta forma serían más fuertes. Cuando lo fueron les hizo que se olvidaran de él y vivió entre ellos como un ghoul, hasta hoy. El como yo se de su existencia es... otro secreto. Sólo puedo decir que si yo fuera Horus (que naturalmente no lo soy), tendría mucho cuidado de la venganza de una momia ghoul necromántica aliada de Vampiros Venecianos.
Esta es la historia del Clan Giovanni contada por uno de sus miembros (anónimo), por lo cual puede no ser cien por cien verídica.
Era demasiado poderoso para que se le permitiera seguir viviendo, así que Horus le venció en un duelo mágico y le transformó su KA en polvo. Su khat fue quemado y sus cenizas esparcidas en el Nilo, y Horus hizo algo que nunca había hecho antes, invocó el nivel 5º de Hekau sobre el Necromante; consiguiendo así que la realidad olvidara al Necromante. ¿Podría esto realmente matar a una momia? Los años pasaron y el Necromante no volvió a la vida, sólo Horus le recordaba. Pero la maldición de las momias es tal que ni siquiera la magia Hekau puede destruirlas. La realidad había olvidado el KA y el Khat del Necromante, pero no su Ba, ya que el Ba es eterno, y este pululaba por la Umbra. Pasaron muchos años hasta que recuperara la conciencia y muchos más hasta que recuperó su inteligencia, pero finalmente recuerdos y mágia volvieron a él encendiendo el fuego del odio. Pero no podía hacer mucho desde el mundo de los espíritus, por lo que busco un camino para volver al mundo de los vivos. Tardó hasta la Edad Media antes de que el Necromante rebautizado como Tempt-Tha (ya que ni el mismo podía recordar su nombre) tuviera una oportunidad para volver a la vida. Una reunión de Necromantes Venecianos (con todos ustedes... los ¡¡Giovanni!!) estaban invocando algún espíritu para ayudarles. Y Tempt-Tha les oyo y obedeció. Para que le ayudaran a encarnarse, les enseñó artes oscuras. Les incitó a convertirse en vampiros, de esta forma serían más fuertes. Cuando lo fueron les hizo que se olvidaran de él y vivió entre ellos como un ghoul, hasta hoy. El como yo se de su existencia es... otro secreto. Sólo puedo decir que si yo fuera Horus (que naturalmente no lo soy), tendría mucho cuidado de la venganza de una momia ghoul necromántica aliada de Vampiros Venecianos.
Esta es la historia del Clan Giovanni contada por uno de sus miembros (anónimo), por lo cual puede no ser cien por cien verídica.
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