jueves, 4 de octubre de 2012

El encuentro



Revisando perfiles en una de mis paginas favoritas encontré un Nick que me llamo la atención: “Fantasía-distinta”. La descripción decía: Mi búsqueda esta orientada a un hombre (no pareja ni mujer sola) que desee tener una mujer de su propiedad, no digo amante, ni novia ni pareja, digo propiedad, con esto quiero decir estar yo dispuesta a todo lo que me pida, desde lo mas mínimo sin po
der decir que no a nada, recibir un severo castigo físico si el hombre considera necesario para que yo aprenda, que este hombre sepa humillarme, hacerme sentir muy baja.
Eso llamo aun más mi atención, tanto que no pude sacármela de la cabeza, imaginando situaciones y posibles escenarios donde llevar a cabo “su” fantasía. No pude resistirme más y le envié un mensaje para contactarla. Al cabo de unos días me responde el mensaje dándome una dirección de mail para ponernos en contacto.
Mi cabeza era un torbellino de imágenes, situaciones que nunca había experimentado, pero que se despertaron en mi apenas conocí ese Nick, pase de ser un tipo normal a ser un sádico irrefrenable.
Nos pusimos en contacto, quería saber de mi experiencia en el tema y no se me ocurrió otra cosa que mentirle. Mentirle?. Solo le estaba narrando las cosas que estaban en mi cabeza y logre convencerla de que este pobre tipo era todo un experto. Me dio la dirección de una quinta que tenia preparada para tal fin y la fecha elegida seria el próximo fin de semana.
Llegado el día me dirijo a la quinta, ella ya estaba esperándome, me hace pasar al interior, entre tímidamente sin saber como comenzar y me lleva a una habitación donde se encontraban todo tipo de aparatos sobre las mesas dignos de una cámara de torturas del siglo XV. Todas las imágenes que pasaron por mi cabeza se estaban haciendo realidad.
De pronto siento una voz a mis espaldas que me dice: “Cuando quieras” y como si fuera una orden mi brazo fue accionado como por un resorte propinándole un golpe en la mejilla con el dorso de mi puño. A partir de ahí todo fue muy confuso, solo recuerdo haberla atado a unas cadenas que colgaban del techo y un látigo en mi mano que golpeaba una y otra vez su espalda desnuda y ensangrentada, sus gritos mezcla de dolor y placer nublaban aun mas mis sentidos y su placer me ponía mas iracundo aun, el látigo no era suficiente. Tome una navaja de arriba de una de las mesas y comencé a tajearla sin piedad, solo se veía la sangre y las costillas que asomaban por cada uno de los cortes, su placer fue en aumento, gozaba y gemía de placer con cada uno de mis embates, lo que para mi era cada vez mas insoportable, ya no quería escucharla mas, basta, basta, BASTAAAAA!!!!
Cuando me calme tenia su cabeza colgando de mi mano, solo se escuchaba el borboteo de la sangre saliendo de su cuello y cayendo al piso.
Una mezcla de pánico y asco se apodero de mi, me acurruque en una esquina de la habitación , la mirada perdida y los brazos alrededor de mis piernas mientras mi cuerpo se mecía adelante y atrás rítmicamente. Que hice!!!. La mate!!!
Así pasaron las horas, su sangre ya eran costras en mis manos y en todo mi cuerpo, algo tenia que hacer, tenia que hacer desaparecer el cuerpo. Donde?. Entonces la idea vino a mi mente, cortarla en pedazos y enterrarla por diferentes lugares, así que empecé con la lúgubre tarea de cortar cada uno de sus miembros en pedazos y ponerlos en bolsas. Los subí al auto, maneje varios kilómetros hasta encontrar un descampado y empecé a enterrarlos en distintos lugares para que no fueran encontrados nunca mas.
Pasaron un par de años de aquellos acontecimientos, solo eran recuerdos borrosos de una pesadilla que mi mente se había ocupado de ir borrando, mi vida continuo normalmente aburrida como lo había sido siempre, hasta que un día, al entrar de nuevo en la pagina mi corazón dio un salto, otro Nick: “fantasía-nueva”. Alguien se había enterado de lo que había hecho tiempo atrás?.
Le envío un mensaje: Quien eres?
Me responde: Tranquilo chiquito, no abuses, deja que se diviertan un poco los demás.. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario