La ciudades olvidadas de la Luna.

Desde el siglo XVI hasta hoy día se han venido observando luces en la superficie de la Luna, generalmente blancas y del tamaño de una estrella, pero también se ven, amarillentas o azuladas, se mueven o son estáticas entre unos segundos y varios días. No  es tan raro ver de repente la aparición de un punto con extraordinario brillo en la superficie lunar, son muchas las personas que han visto estos puntos brillantes, entre las que se incluye el que escribe estas líneas,  aunque no hay que descartar que se trate de algún fenómeno óptico o el choque de cualquier meteorito con suficiente masa y fuerza para que el impacto libere la suficiente energía a modo de explosión, aunque en estos casos el destello durará unos pocos segundos. Muchos son los astrónomos que han visto luces y puntos brillantes en al superficie de la Luna, incluso algunos antiguamente han interpretado estas luces y punto brillantes como erupciones volcánicas, hoy día sabemos que ésta hipótesis es probablemente la más alejada de la realidad.

Nuestro satélite la Luna tiene un tamaño excesivamente grande para girar sobre un planeta como la Tierra, es como si la Tierra y la Luna formasen un sistema planetario doble, en el que hay un planeta lleno de vida, la Tierra y otro muerto, la Luna, incluso uno tiene una importante atmósfera y el otro carece de ella, la aparenta ser un gran pedrusco muerto, el sistema Tierra Luna aparenta ser muy antagónico, aunque quizá no lo sea tanto, pero sin duda nuestro satélite encierra sus misterios, como la naturaleza de su campo magnético, el hecho de que la Luna siempre presente la misma cara a la Tierra no deja de ser una singularidad, además el origen de la Luna sigue sin estar claro, al igual que su edad, pues podría ser más antigua que la propia Tierra, nuestro satélite guarda muchos misterios que seguro que de ser descubiertos darían luz sobre la existencia de la vida en la Tierra y el origen y formación del sistema solar.

En 1969, durante el vuelo del módulo estadounidense Eagle en órbita alrededor de la Luna, la Misión Central de Houston recibió varias llamadas de astrónomos aficionados que informaron sobre gran cantidad de  destellos y puntos brillantes en las inmediaciones del cráter Aristarco, muy cerca de donde pasaría la nave. Así que, Houston pidió a Neil Armstrong que se asomara a la ventanilla a ver que veía, el astronauta informó sobre: "un área considerablemente más iluminada que las zonas de alrededor. Parece que tiene algo de fluorescencia". La NASA nunca se pronunció sobre este fenómeno, a pesar de que los niveles de radioactividad de la zona eran de difícil explicación.

Existen testimonios de avistamientos de objetos voladores extraños desde la más remota antigüedad, pero la distancia en el tiempo dificulta la aportación de pruebas satisfactorias, pero con la creación de la NASA en 1958 las cosas comenzaron a cambiar, varios de sus pilotos y astronautas han testificado que han visto artefactos volantes de origen desconocido, pero no vamos a entrar en los numerosos casos, bien documentados sobre el tema y que aportan credibilidad al tema O.V.N.I. y extraterrestre, salvo a aquellos que afectan a la Luna.

Los secretos del viaje a la luna
La carrera espacial se centro en llegar a la Luna mediante  el programa Apolo. El presidente Kennedy ya prometió situar un hombre en la Luna, así que llegó el día, los astronautas del Apolo 11 dieron sus primeros pasos sobre la superficie de la Luna el 20 de julio de 1969, el viaje a  la Luna fue muy bien planificado y sus objetivos realmente iban más allá de posarse en la Luna como vemos en el video siguiente, los astronautas poco después siguiendo la política oficial de la NASA declararon no haber visto nada extraño, pero a su vez circularon rumores de que, durante su estancia en la Luna, la tripulación nunca estuvo sola.

A continuación se incluye una conversación que de forma accidental fue captada entre la tripulación del Apolo 11 y el control de la misión por algunos radioaficionados, evidentemente la NASA niega ésta conversación y la conversación correspondiente a ese lapsus de tiempo queda como clasificada, leamos lo que hablaron:

Apolo 11: ¿ Qué diablos era? Es lo que quiero saber. Estas cosas eran gigantescas, señor. ¿ ¡Dios mío, usted no lo creería!

NASA: ¿Qué... ?¿Qué diablos pasa?

Apolo 11: Están aquí, bajo la superficie.

NASA: ¿ Qué hay ahí? Control de misión llamando a Apolo 11.

Apolo 11: Estamos aquí, los tres. Pero hemos encontrado visitantes... Por las instalaciones, parece que han estado aquí desde hace mucho tiempo... Digo que ahí fuera hay aparatos espaciales. Están alineados en filas al otro lado del cráter...

Esta conversación fue escuchada casualmente por unos radioaficionados en  un canal reservado para estos mensajes. Sin embargo, Neil Armstrong, el primer hombre que pisó la Luna negó como es natural dicha conversación, pero también sabemos que el retardo de tiempo en la transmisión del diálogo entre el centro de control y el Apolo 11 permitió a la NASA censurar la información referente a los visitantes.

En 1966, el profesor norteamericano W. Blair accedió a fotos secretas de la NASA correspondientes a la misión Orbiter-2 de abril de ese mismo año. En ellas descubrió monumentos de más de 200 m. de altura distribuidos de forma geométrica por la superficie Lunar.
También se pueden observar otros fenómenos como en el cráter Uker, en el que se encuentra un triángulo perfecto de 28 Km. Uniendo las tres áreas más nítidas del borde del cráter se forma otro triángulo equilátero, este cráter se encuentra cerca del centro de la Luna y es perfectamente visible con un pequeño telescopio. 

La pregunta es si todo eso aparece en la cara visible de la Luna, qué puede haber detrás en la cara oculta, ni la NASA ni nadie habla de ello.

Un fenómeno muy singular se dio en el viaje de regreso de la nave Apolo 12, la NASA a modo de experimento estrelló el módulo lunar, que ya no era utilizable contra la superficie de la Luna, así podían comprobar que ocurría si un objeto de dicho tamaño y masa chocaba contra la superficie lunar. Los resultados fueron publicados en la revista Science el 12 de noviembre de 1971, y fue una sorpresa conocer que las ondas de choque, en vez de disminuir con el tiempo, aumentaron con el paso de los minutos. Duraron casi una hora. ¿Cómo era posible?, es algo difícil de explicar a no ser que la Luna este hueca y mantenga en su interior algún líquido o fluido.

Revisando la historia vemos que la Luna ha sido objeto de culto por muchas civilizaciones, y hasta cierto punto es natural, pero en algunos textos sumerios se dice que el Dios EA vivió 10.000 años en la Luna observando los cielos y estudiando las leyes del universo, qué puede significar esto, entre los sumerios se atribuía al dios EA la creación del ser humano en gran parte, si es cierto que en casi todas las civilizaciones y culturas antiguas a los dioses se les relaciona con el Sol, la Luna, planetas y estrellas, incluso llegar a ser una misma cosa, pero en este caso se cita que un Dios, vivió durante 10.000 años realizando una investigación, si fue así, seguro que dicho dios podría muy bien ser un ser extraterrestre, y si estuvo tanto tiempo alguna huella dejaría, y si el objetivo era realmente observar el cielo, podía hacerlo igualmente desde una u otra cara de la Luna. Si los videos e imágenes sobre las ruinas y demás construcciones artificiales son veraces, y su antigüedad tal y como dicen es de miles de años, podríamos encontrarnos con alguna raza o expedición extraterrestre que colonizase la Luna hace miles de años encabezada o dirigida por aquel al que los sumerios llamaron el Dios EA, es cierto que la Luna se ha asociado en la antigüedad a muchas deidades, pero de ninguna se habla de una función tan especial y un tiempo tan concreto. Sabemos que con la Luna hay mucho misterio, la carrera espacial se ha interrumpido y paralizado durante mucho tiempo, por lo menos eso es lo que han querido hacernos creer, es difícil pensar que con los avances tecnológicos de los últimos años se haya dejado de ir, paralizar la investigación de cuestiones tan importantes no es propio de la naturaleza humana, es más que probable que se hayan realizado viajes y misiones a la Luna desconocidas para el público y no sólo por la NASA. Otra pregunta es, a que han ido esas misiones ocultas y las públicas, sólo a recoger muestras y hacer algún que otro experimento, cuesta creer que después de todos los esfuerzos realizados hasta el Apolo 11, si no se hubiese encontrado nada de interés no se habría puesto más empeño en buscar, en investigar y conocer más a fondo la Luna, la naturaleza humana y los intereses políticos y económicos empujan a la conquista, el descubrimiento y la investigación y de últimas la colonización, así que, sin duda, todo eso se ha hecho y sigue haciéndose en secreto, al igual que ocurre en la Tierra, en las profundidades marinas o en las zonas menos exploradas como los polos. No hay duda de que en la Luna ocurren cosas que han cambiado la política de los viajes espaciales. Las muchas imágenes son muy sugerentes, y los numerosos fenómenos como la aparición de puntos brillantes inexplicables también, sobre el video que podéis ver, “sin comentarios”, la calidad es muy mala, pero ahí está.  Si alguna civilización extraterrestre en el pasado  ha vivido en la Luna seguramente a intervenido en el desarrollo e incluso participado en el origen de nuestra civilización, seguramente nos han observado, e incluso intervenido o influido en nuestro destino, y si siguen allí, tal y como sugieren las conversaciones captadas al Apolo 11 y el mando de control de la misión, que es lo que hacen allí, supervisarnos, o no se preocupan de nosotros y van a sus cosas, interferimos nosotros con nuestra presencia en sus planes, no lo sabemos, pero el análisis nos lleva a establecer varias posibilidades, las ruinas encontradas y posibles formaciones artificiales corresponden a la misma especie o raza de extraterrestres, o los que estuvieron hace miles de años se fueron y ahora hay otra expedición, siguen siendo los mismos, otra cuestión es, los que están en la Luna actualmente son otra raza o especie diferente a la que en un pasado visitó o se estableció en la Luna.  Esas son cuestiones clave a resolver, pero nos inclinamos a pensar que los Objetos voladores o naves que vieron los astronautas guardan relación con las ruinas, pero una pregunta que surge sin duda es, si las ruinas están formadas por materia lunar, y la Luna carece de atmósfera y probablemente eso ha sido así desde hace muchos años, la estanqueidad para preservar una atmósfera de condiciones habitables de dichas ruinas debería de ser una obra de ingeniería muy especial, a no ser que dichas ruinas fuesen de una época tan antigua en la que la Luna hubiese dispuesto de atmósfera, pero esta suposición es muy difícil de mantener y las ruinas debieran de tener una antigüedad  que podría superar en tiempo lo razonable, además construir con material lunar parece un gran esfuerzo y un trabajo complejo en el caso que se realizasen tales obras en ausencia de atmósfera, la verdad es que la existencia de ruinas en la Luna tiene argumentos en contra que hacen difícil tal posibilidad, pero también es cierto que poco sabemos de los que es capaz una tecnología más avanzada. Si hay extraterrestres en la Luna y qué hacen, desde luego no lo sabemos, si han dejado huellas, seguramente las agencias e instituciones más poderosas de la Tierra intentarán borrarlas, la política de los últimos años es negar la existencia de extraterrestres utilizando todos los medios posibles. No hay que olvidar que los vestigios y huellas de una civilización superior son de gran valor, son pistas para recopilar información, conocimientos y tecnología superior. Y quién se explica que con lo curioso que es el ser humano la cara oculta de la Luna siga realmente siendo una desconocida para el público, seguro que es más conocida para unos pocos que para el resto de la humanidad.  Una pregunta que podemos hacernos es, qué es lo que parece escasear más en el espacio y que es de gran valor para la vida, sin duda el “agua”, es posible que tanto en la Luna como en otros satélites o planetas exista agua, agua en las profundidades de la Luna, o en algunas zonas de Marte u otros planetas, o en las lunas del resto de planetas, pensamos que si la luna en su interior contiene considerables reservas de agua, éste seria un buen motivo para establecer un asentamiento cualquier especie extraterrestre, e incluso mantenerlo.

Tal y como avanza la tecnología la conquista de la Luna será un hecho para muchos países y organizaciones en unas décadas, y se podrán descubrir las huellas del pasado, ahora bien, hay una teoría que apunta a que en los últimos años se han intentado destruir todo tipo de pruebas en la Luna que hagan mención a posible existencia de extraterrestres, incluso se dice que para ello se ha utilizado armamento nuclear, en fin, ya sabemos que la realidad supera a veces la ficción, pero a continuación relatamos algunos hechos que pueden llevarnos a pensar cualquier cosa, pero de lo que no hay duda es que la posibilidad de que exista vida extraterrestre inteligente visitando la Tierra y la Luna es bastante probable, y los diferentes gobiernos ocultan con todos los medios estos hechos.

 

BOMBAS ATÓMICAS EN LA LUNA

Hace ya medio siglo, concretamente el 28 de enero de 1958, en un discurso pronunciado por el general Homer A. Boushey en el Aero Club de Washington se barajaba la idea de usar armas atómicas en la Luna:

En mayo de 2000 el doctor Leonard Reiffel, un físico de 73 años de edad que trabajó en la década de 1950 en la Fundación para la Investigación de Armamento, reveló un extraordinario proyecto que habían elaborado los militares estadounidenses medio siglo antes. Al parecer, la Fuerza Aérea desarrolló un plan de alto secreto para detonar una bomba nuclear en la Luna. Tal y como suena.

La Fuerza Aérea quería saber, entre otras cosas, si el tamaño de la nube atómica generada por la detonación sería lo suficientemente grande como para ser visible desde la Tierra a simple vista. Los militares pretendían realizar la explosión nuclear en la cara oculta de la Luna, muy cerca del límite visible. Así lograrían que los rayos del Sol iluminaran la nube radiactiva para hacerla visible. Las pretensiones iniciales eran usar un artefacto dos o tres veces mayor que el de la bomba atómica de Hiroshima.

Para poner en marcha el proyecto, el Pentágono se puso en contacto a finales de 1958 con muy pocos científicos, entre ellos se encontraba un jovencísimo Carl Sagan. En efecto, el famoso y pacífico divulgador científico tuvo su misión en el proyecto, denominado “A119-B”. Concretamente Sagan se encargó de calcular cómo afectaría la débil gravedad lunar a la nube radiactiva y hasta qué punto se expandiría en el espacio exterior. El joven científico fue más allá, sugiriendo que se podría usar la explosión para examinar si la nube contenía algún tipo de material orgánico.

El pentágono nunca ha desmentido la información filtrada recientemente por varios científicos acerca del diabólico plan, pero ¿podemos estar seguros de que en los últimos 50 años jamás se utilizaron armas nucleares en el espacio?

Viendo lo poderosa que es la industria del armamento, que vende armas apara alimentar las guerras en continentes como África, que promueve y presiona para originar guerras como Afganistán e Irak, y alimenta todos los conflictos existentes en la Tierra, experimentar con armamento nuclear en el espacio o la Luna debe de ser una minucia, algo que sólo deben ocultar  a la opinión pública.