Los Ventrue
experimentaron un gran resurgimiento tras la creación de la Camarilla, no sólo
en número, sino
también en oportunidades y cambios internos. La mayoría de los Anarquistas
habían sido
sometidos, y aunque muchos de ellos se habían unido a las filas del Sabbat, los
Ventrue
y sus aliados
disponían de recursos suficientes para defenderse y reafirmar su dominio sobre
gran
parte del mundo
conocido. Paralelamente, la humanidad se embarcaba en una nueva edad de
progresos y
descubrimientos en todos los campos. Los Ventrue utilizaron el auge de la
ciencia y la
racionalidad para
crear un entorno pacífico, donde los Vástagos pudiesen habitar sin el temor a
las
persecuciones. La
actuación de los Ventrue en la sociedad cambió, evolucionando hacia métodos de
influencia más
sutiles.
Robert Kross, un
antiguo alemán de los Príncipes Mercaderes y asistente de Hardestadt, fue
uno de los
principales Ventrue que continuaron aprovechando el potencial del comercio y
las
nuevas industrias.
Robert Kross se asentó en Holanda y en unos pocos años estableció su presencia
convirtiéndose en el socio
invisible de muchas compañías mercantiles. En unas décadas Kross y sus
socios consiguieron
una gran riqueza mediante el comercio con el Lejano Oriente. Su chiquillo Juan
Miguel Ramírez
repitió el éxito de su sire en España, introduciendo su influencia en los
galeones de
oro que llegaban de
América.
En toda Europa la
nueva generación de los Ventrue abrió el camino al comercio
internacional, aunque
fueron los mortales quienes más se involucraron en las empresas mercantiles,
dado que los Ventrue
no solían arriesgarse a viajar lejos de sus dominios. El clan pronto se
convirtió
en el más rico de
todos los Vástagos, y construyeron fortunas que todavía sobreviven en las
noches
actuales. No
obstante, esta prosperidad comercial aumentó el cisma con los antitribu Ventrue
del
Sabbat, que
desaprobaban el rumbo que había tomado el clan. Incluso algunos jóvenes
vampiros del
clan del Sabbat
consideraban que los antiguos Ventrue de la Camarilla habían renunciado a su
nobleza. Por
supuesto, los Ventrue de la Camarilla afirmaban que la riqueza sólo era un
medio para
mantener el liderazgo
y que el tiempo del feudalismo estaba terminando frente a las posibilidades
de la nueva economía.
Los Ventrue de la
Camarilla consideraban que los Amos Secretos que habían luchado contra
el clan desde las
Primeras Noches se habían infiltrado dentro del Sabbat, y se comprometieron a
destruir a sus
enemigos. Durante siglos Europa fue testigo de la guerra entre sectas. Contra
el
trasfondo de la
guerra entre vampiros se sucedieron muchos conflictos mortales y los dos bandos
consiguieron
resonantes victorias y derrotas. Finalmente, a principios del siglo XVIII, los
Ventrue y
sus aliados
consiguieron expulsar a la mayor parte de los vampiros del Sabbat de Europa,
salvo
algunos bastiones
aislados, obligándoles a establecerse en el Nuevo Mundo.
LA REVOLUCIÓN INGLESA
Mithras se convirtió
en uno de los principales pilares del clan Ventrue por su propio poder e
influencia
personales, y aprovechó su alianza con la Camarilla para fomentar sus
intereses. El
turbulento reinado de
Enrique VIII de Inglaterra y las guerras de religión proporcionaron a Mithras
la cubierta perfecta
para quebrar la influencia del catolicismo romano sobre su dominio y atacar a
sus enemigos de los
clanes Brujah y Tremere. Sin embargo, la guerra distrajo a Mithras de la
sucesión dinástica y
tras ser traicionado por su senescal y chiquillo, el Duque Amber, los Toreador
consiguieron que
Jacobo IV de Escocia fuese coronado en 1602 como Jacobo I de Inglaterra,
asumiendo el control
de la monarquía.
Con el nuevo monarca
Mithras quedó relegado de golpe al papel de un señor regional más, y
los Toreador se
convirtieron en el principal poder de Inglaterra. Afortunadamente el Clan de la
Rosa
no consiguió sacar
partido de su éxito a largo plazo y su determinación por apoyar a la monarquía
provocaría su
derrota. Furioso, Mithras depuso a su senescal –que apenas consiguió escapar
con
vida- y comenzó a
elaborar planes para derribar al monarca inglés.
Pronto se hizo
evidente que la elección de Jacobo I no había sido muy acertada. El empeño
del rey por convertir
Inglaterra en una monarquía absoluta lo enfrentó con el Parlamento a lo largo
de su reinado. En
1625 fue sucedido por su hijo Carlos I, que aunque fomentó las artes y la
cultura
carecía de sutileza y
sofisticación política, continuando con la lucha entre Corona y Parlamento
iniciada por su
padre. Cuando Carlos I intentó arrestar a varios parlamentarios n 1642 comenzó
una
guerra civil.
En la guerra civil,
también conocida como la Gran Rebelión, lucharon vampiros y mortales,
pues los Ventrue
estaban decididos a recuperar el poder. Pronto encontraron unos sorprendentes
aliados en los
Brujah, que apoyaban las peticiones del Parlamento, mientras los Toreador se
apoyaban en los
caballeros partidarios del monarca, pues consideraban que el tiempo terminaría
por
volver la guerra a su
favor, ya que el absolutismo se estaba extendiendo por toda Europa durante la
misma época. Durante
los siguientes diez años las posiciones de Ventrue y Toreador cambiaron
constantemente con
continuos avances y retiradas. Sin embargo, finalmente el sentido práctico de
los Ventrue y las dotes
estratégicas de Mithras se impusieron, ayudando a la creación del Nuevo
Ejército Modelo, una
nueva concepción militar que resultó la ventaja decisiva del Parlamento. Los
servidores de Mithras
consiguieron un importante triunfo en 1645 que llevó a la victoria del
Parlamento.
Finalmente el rey fue capturado por los parlamentarios en 1647, y la paz
parecía
asegurada, pero las
divisiones políticas provocaron el regreso a la guerra.
Oliver Cromwell, un
importante parlamentario, trató de persuadir al rey Carlos I de que
aceptara las reformas
exigidas por el Parlamento. El rey pareció ceder, pero huyó de la vigilancia
del Parlamento e
inició nuevos alzamientos de sus partidarios. Desafortunadamente para el
monarca
las insurrecciones
fracasaron y él fue capturado de nuevo. Tras el juicio del Parlamento fue
condenado a muerte en
1649. Inglaterra fue declarada una república con Cromwell como líder del
Parlamento. Dos años
después los últimos partidarios del rey fueron sometidos.
La Mascarada estuvo
al borde de la ruptura en varias ocasiones durante la Guerra Civil, y
varios Vástagos
desaparecieron durante la revuelta. Temerosos de la intensidad del conflicto la
Camarilla envió a
varios observadores para tratar de mediar entre Ventrue y Toreador. El Príncipe
de Londres no estuvo
muy conforme ya que entre estos mediadores se encontraba Violetta de París,
Justicar Toreador, y
los Vástagos franceses del clan habían prestado un discreto apoyo a sus
hermanos de
Inglaterra. La intervención de Violetta no obstante trajo una paz temporal
entre ambos
clanes, y la
restauración de la monarquía inglesa en 1661, sometida a las decisiones del
Parlamento,
fue considerada como
un gesto conciliatorio hacia los Toreador. Durante unos años la paz se
estableció nuevamente
en Inglaterra, aunque posteriormente surgirían algunos rebrotes de
enfrentamiento. En
1688 la Revolución Gloriosa provocó la caída del rey Jacobo II y su sustitución
por el holandés
Guillermo de Orange, un monarca que se adecuaba más a los deseos de los
Ventrue.
El fin “oficial” de
las hostilidades entre los Ventrue y Toreador de Inglaterra llegó con la
firma del Tratado de
Durham en 1693. El Tratado reconocía la situación existente –los Ventrue
retenían el dominio
de Londres y del sudeste de Gran Bretaña, mientras que los Toreador mantenían
el control de
Escocia. No fue un acuerdo entre iguales: el tratado garantizaba que los
Toreador no se
aliarían con otros
clanes, especialmente los Tremere, ni intentarían conseguir dominios fuera de
Escocia. A cambio se
garantizaba la seguridad del feudo de Edimburgo. La ruptura de este acuerdo
por parte de
cualquier Toreador llevaría a severas represalias. Hubo un intercambio de
rehenes entre
ambas partes para
garantizar el cumplimiento del Tratado de Durham, pero muchos Toreador
guardaron en secreto
su resentimiento por esta paz forzosa.
Como resultado de la
Gran Rebelión, Mithras y los demás príncipes ingleses se distanciaron.
Muchos de los
príncipes habían apoyado a los Toreador y los Realistas, y varios fueron
derrocados
por los Ventrue y los
seguidores del Parlamento. Mithras volcó sus esfuerzos en Londres y se
involucró cada vez
menos en la política de otros feudos.
La caída de Jacobo II
en 1688 no había sido completamente aceptada por varios grupos
influyentes en
Escocia, Gales y Francia (conocidos como Jacobitas), y en las décadas
siguientes sus
descendientes
trataron de recuperar el trono inglés. Los Toreador encontraron en los
Jacobitas unos
peones muy útiles y
los utilizaron para golpear a los Ventrue. Las revueltas de 1715 y 1719
tuvieron
un impacto poco
considerable, y los Ventrue decidieron ignorar la muerte de varios rehenes del
clan
en Edimburgo. Sin
embargo, la rebelión de 1745 fue más considerable tanto en impacto mortal
como en participación
vampírica. Carlos Estuardo consiguió controlar la mayor parte de Escocia,
pero sus esperanzas
de llevar la revuelta a Inglaterra fracasaron. Tras la aplastante derrota de
Culoden en 1746 el
pretendiente Jacobita tuvo que escapar y la mayoría de los rebeldes huyeron o
fueron ejecutados.
Cansado de los Toreador, Mithras ordenó la ejecución de varios rehenes del clan
situados en Londres,
a pesar de las protestas de los Toreador de Edimburgo, que habían ejecutado a
sus rehenes Ventrue
en 1715. En los años siguientes los rehenes fueron sustituidos y las relaciones
entre ambos clanes se
normalizaron, pero los Ventrue hicieron valer su dominio mediante el Acta de
Unión
de 1801, que unificaba el gobierno de Escocia e Inglaterra.
AMÉRICA
Aunque Mithras no
sentía un interés especial por el Nuevo Mundo, pronto vio en las
colonias una
oportunidad para resarcirse de su pérdida de influencia en los dominios
ingleses.
Aunque otros clanes
los habían precedido en el proceso colonizador, muy pronto durante el siglo
XVIII jóvenes y
emprendedores Ventrue, apoyados por sus antiguos, buscaron establecer nuevos
dominios en la Costa
Este de Norteamérica. En 1760 los ingleses conquistaron Nueva Francia (en el
actual Canadá) y su
posesión les fue confirmada por el Tratado de París de 1763, que puso fin a la
Guerra de los Siete
Años.
El liderazgo de la
colonia de Nueva Francia estaba en manos de varios decadentes Toreador, que en
cuanto tuvieron
oportunidad regresaron a Francia. Los Ventrue de Londres enviaron a Kyle
Strathcona para que
supervisara la presencia vampírica en el nuevo territorio, añadiéndolo a sus
dominios.
Cuando estalló la
Revolución Americana en 1776 los Ventrue se encontraban muy mal
preparados y
superados en número por otros clanes, como los Brujah, Lasombra y Tzimisce. El
Sabbat había
instalado su presencia en las colonias desde el siglo XVI. Algunos de los
Príncipes
Ventrue de América o
“principitos” como les llamaban los antiguos de Europa, cayeron ante sus
enemigos, pero
afortunadamente para ellos el estallido de la Primera Guerra Civil del Sabbat y
la
desorganización de
los Vástagos americanos les permitieron sobrevivir. Los Ventrue se
reorganizaron
explotando las luchas internas de sus adversarios y fomentando el proceso
colonizador hacia el
Oeste, donde los nuevos enclaves se convirtieron en importantes dominios de
la Camarilla. No
obstante, el clan sufrió grandes pérdidas en la Costa Este y en Canadá, donde
el
Príncipe Kyle
Strathcona terminó uniéndose al Sabbat.
La Guerra de Secesión
de Estados Unidos(1861-1865) proporcionó una nueva oportunidad a
los Ventrue de
golpear a sus enemigos. Contrariamente a una opinión generalizada, el clan no
apoyaba en conjunto
la esclavitud y nunca prestó mucha atención al comercio de esclavos. Cuando
estalló el conflicto
los Ventrue utilizaron su influencia, siguiendo a los ejércitos para deslizarse
en
las ciudades del
Sabbat y reclamarlas para la Camarilla. Al terminar la guerra los Ventrue
controlaban
importantes ciudades como Chicago, Nueva Orleáns, San Luis, Nueva Orleáns, San
Francisco y ayudaron
a otros clanes a conquistar su dominio en otras como Atlanta, Savannah,
Richmond y
Charleston.
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