Desde tiempos inmemoriales, la
humanidad se encontró con fenómenos que están más allá de su comprensión
y razonamiento. Hechos que provocan curiosidad y que llevan al hombre
hacia una constante búsqueda de respuestas.
Si bien con el paso de los años, la ciencia y el pensamiento evolucionaron y esclarecieron muchas incógnitas, todavía el mundo encierra muchos hechos enigmáticos.
Y ahí va nuestra propuesta: introducirnos en el misterio de algunos enigmas que la humanidad aún no pudo develar, conocer juntos las investigaciones y teorías que intentaron desentrañarlos.
¡Algo que no te podés perder!
Si bien con el paso de los años, la ciencia y el pensamiento evolucionaron y esclarecieron muchas incógnitas, todavía el mundo encierra muchos hechos enigmáticos.
Y ahí va nuestra propuesta: introducirnos en el misterio de algunos enigmas que la humanidad aún no pudo develar, conocer juntos las investigaciones y teorías que intentaron desentrañarlos.
¡Algo que no te podés perder!
La
Atlántida: ¿Existió o no?
Sobre la
ubicación del continente hundido, Platón decía que "las islas Azores
y Canarias son los restos de Atlántida".
Sin embargo, nadie hasta ahora ha podido ubicar con certeza el lugar del mar o de la tierra en donde estuvo La Atlántida.
El mayor obstáculo de las investigaciones es que hay poca o casi ninguna documentación que confirme su existencia. En alguna ocasión se realizaron expediciones científicas submarinas en las profundidades del océano para encontrar restos de la Atlántida. Sin embargo, las búsquedas no obtuvieron resultado.
La leyenda perdura porque la ciencia no encontró pruebas concretas de su existencia.
El enigma de la Atlántida es universal y muchos pueblos del mundo aceptan que hace miles y miles de años existió ese gran continente cuya maravillosa cultura describieron escritores e historiadores de la antigüedad.
Eran tiempos en que el mar no estaba en donde está y las tierras tenían formas distintas a las actuales. Quizás algún día, con el paso de los siglos, se descubra si la Atlántida realmente existió alguna vez...
Sin embargo, nadie hasta ahora ha podido ubicar con certeza el lugar del mar o de la tierra en donde estuvo La Atlántida.
El mayor obstáculo de las investigaciones es que hay poca o casi ninguna documentación que confirme su existencia. En alguna ocasión se realizaron expediciones científicas submarinas en las profundidades del océano para encontrar restos de la Atlántida. Sin embargo, las búsquedas no obtuvieron resultado.
La leyenda perdura porque la ciencia no encontró pruebas concretas de su existencia.
El enigma de la Atlántida es universal y muchos pueblos del mundo aceptan que hace miles y miles de años existió ese gran continente cuya maravillosa cultura describieron escritores e historiadores de la antigüedad.
Eran tiempos en que el mar no estaba en donde está y las tierras tenían formas distintas a las actuales. Quizás algún día, con el paso de los siglos, se descubra si la Atlántida realmente existió alguna vez...
El
enigma continúa...La Gran piramide de KEOPS
Casi no hay
pruebas de ello. La Gran Pirámide de Keops es un verdadero
enigma. Parece que cuanto más se avanza en las investigaciones, más
difícil es descubrir sus misterios ocultos.
Para muchos, su precisión sólo puede explicarse afirmando que fue construida por los mismos dioses.
La pirámide de Keops tiene una superficie de 48.000 m2, y una altura de 146,60 metros (la de un edificio de 50 pisos).
Para construirla hoy en día, harían falta 800.000 camiones de gran tonelaje que transportaran los bloques de piedra.
En el área que ocupa la Gran Pirámide cabrían ocho canchas de fútbol.
Hace algunos años, el escritor Erich von Däniken, en su obra “Recuerdos del futuro”, hizo la siguiente afirmación: “Hoy, en el siglo XX, ningún arquitecto podría construir una copia de la pirámide de Keops, aunque los recursos técnicos de todos los continentes estuvieran a su disposición."
Aún hoy, en el siglo XXI, el enigma continúa...
Para muchos, su precisión sólo puede explicarse afirmando que fue construida por los mismos dioses.
La pirámide de Keops tiene una superficie de 48.000 m2, y una altura de 146,60 metros (la de un edificio de 50 pisos).
Para construirla hoy en día, harían falta 800.000 camiones de gran tonelaje que transportaran los bloques de piedra.
En el área que ocupa la Gran Pirámide cabrían ocho canchas de fútbol.
Hace algunos años, el escritor Erich von Däniken, en su obra “Recuerdos del futuro”, hizo la siguiente afirmación: “Hoy, en el siglo XX, ningún arquitecto podría construir una copia de la pirámide de Keops, aunque los recursos técnicos de todos los continentes estuvieran a su disposición."
Aún hoy, en el siglo XXI, el enigma continúa...
Dibujos en el desierto??
Algunos
científicos afirmaron que las líneas y dibujos podrían representar una
especie de calendario astronómico para calcular fechas y estaciones, o
tener un significado religioso basado en las costumbres y en la religión
de los nazcas. Otros dijeron que representan un mapa de fuentes de agua
subterráneas e, incluso, algunos afirmaron que se trataba de pistas de
aterrizaje para naves espaciales.
Los estudios realizados durante 40 años por la arqueóloga alemana Maria Reiche sostienen que allí los antiguos peruanos desarrollaron un abecedario para anotar los más importantes acontecimientos astronómicos de aquellos días.
En la meseta de Nazca se ven líneas rectas, en zigzag, dibujos en forma de espiral, figuras geométricas en forma de grandes franjas que parecen "pistas de aterrizaje" y otras marcas que representan figuras de animales, como una araña, un mono, un cóndor y un perro.
El lugar es un inmenso yacimiento arqueológico que, tras su descubrimiento, despertó un gran interrogante: ¿Quiénes fueron en realidad y qué aparatos utilizaron para hacer estas figuras, si sólo pueden apreciarse desde el cielo? ¿Qué técnica usaron?
Todavía no fue posible descifrar cómo esta cultura pudo construir este complejo trazado de líneas y figuras tan precisas sin instrumentos modernos o aviones.
En 1994 las "Líneas de Nazca", fueron declaradas por la UNESCO, Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Esos milenarios dibujos del desierto aún son un gran misterio para el hombre de hoy.
Los estudios realizados durante 40 años por la arqueóloga alemana Maria Reiche sostienen que allí los antiguos peruanos desarrollaron un abecedario para anotar los más importantes acontecimientos astronómicos de aquellos días.
En la meseta de Nazca se ven líneas rectas, en zigzag, dibujos en forma de espiral, figuras geométricas en forma de grandes franjas que parecen "pistas de aterrizaje" y otras marcas que representan figuras de animales, como una araña, un mono, un cóndor y un perro.
El lugar es un inmenso yacimiento arqueológico que, tras su descubrimiento, despertó un gran interrogante: ¿Quiénes fueron en realidad y qué aparatos utilizaron para hacer estas figuras, si sólo pueden apreciarse desde el cielo? ¿Qué técnica usaron?
Todavía no fue posible descifrar cómo esta cultura pudo construir este complejo trazado de líneas y figuras tan precisas sin instrumentos modernos o aviones.
En 1994 las "Líneas de Nazca", fueron declaradas por la UNESCO, Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Esos milenarios dibujos del desierto aún son un gran misterio para el hombre de hoy.
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