jueves, 8 de marzo de 2012

KONY 2012 from INVISIBLE CHILDREN

Si eres tremendo desubicado, no has tenido internet desde el lunes o eres mayor de cincuenta años y aún no has visto este documental, hazlo. Lo necesitarás para entender por qué no lo apoyo.

Lo primero que quiero dejar claro es esto: Joseph Kony es un hombre terrible. Los actos que ha cometido y continúa cometiendo son asquerosos, imperdonables y horribles. Joseph Kony necesita y merece ser detenido, juzgado y castigado con todo el peso de la ley por lo que ha hecho. No existe excusa alguna para justificar su comportamiento ni aminorar sus consecuencias. Eso no está en discusión.
Hoy parece que todo el mundo está hablando de esta campaña, de repente todos piensan que al hacer clic en "compartir" están logrando un gran cambio en el mundo y si bien esto me parece importante y admirable, este post es para hacerles ver un poquito más allá. 


Empecemos por lo primero:
La desinformación.
Alex Miller, de la revista Vice lo comparó con "un anuncio de tecnología manipulativo, o el video de los Kings of Leon cuando van de fiesta con unas familia de negros, o el de 30 Seconds to Mars en el que todos los niños hablan de como la música de Jared Leto les salvó la vida" y de verdad que no puedo evitar estar de acuerdo con ello. Durante treinta minutos de documental se habla más respecto a "Invisible Children" la fundación, quienes están detrás de ella y su misión que del problema sobre el cual se empeña tanto en generar conciencia. 
Todos estamos claros de que si vas a hacer un documental sobre un tema es porque vas a informar al respecto, apoyando lo que cuentas y la situación que quieres develar con datos relevantes, verídicos y comprobables. En el caso de "Invisible Children" lo que se hace es más bien confundir, lanzando esos poquitos datos a lo loco sin explicarte bien de qué se tratan o darles tan siquiera la importancia debida. Si a eso le agregas un narrador que pasa más tiempo intentando convencerte que le des like a la página de Facebook de la fundación, que compartas el film hecho por la fundación, compres los brazaletes o dones dinero, lo que tienes es un infomercial mejor producido y disimulado.
Ok, puede que antes de verlo no tuvieras idea de quién es Joseph Kony ni qué hace, eso es totalmente válido, pero la cuestión es que, al momento de proveer datos e informaciones que te lleven a reflexionar verdaderamente sobre la situación, "Invisible Children" deja mucho que desear:
1) Joseph Kony NO está en Uganda. No lo ha estado desde hace unos seis años, cuando fuera expulsado por el Ejército de Uganda tras varios intentos fallidos de alcanzar la paz. Desde entonces, Kony y el LRA han estado operando en la República Democrática del Congo, el sur de Sudán y la República Central de África, que es donde se sospecha que se esconden ahora. Citando este artículo escrito por Michael Wilkerson, no es sino hasta el minuto quince cuando el muy importante hecho de que el LRA ha dejado Uganda es por fin mencionado:
"Mientras el LRA empezó a moverse hacia otros países, Jacob (uno de los niños entrevistados en Uganda) y otros ugandeses vinieron a Estados Unidos a hablar en nombre de toda la gente sufriendo por culpa de Kony. Aunque Uganda estaba relativamente a salvo se sintieron obligados a contar al mundo que Kony seguía ahí afuera y debía ser detenido."
Y por la manera en la que se habla al respecto, uno pensaría no que han huido de Uganda, sino que sus operaciones se han extendido a estos otros países. 
Si bien siguen causando estragos en donde ahora se encuentran, el dirigir los esfuerzos a Uganda específicamente está mal. No sólo el LRA ya no opera ahí si no que muchos de los niños que fueron secuestrados en el pasado han huido o crecido, siendo entonces relevados de las filas, por lo que toda esta situación en ese país se ha visto opacada por problemas mucho más actuales y amenazantes como los altos índices de VIH, prostitución y desempleo, además de una extraña enfermedad conocida como "Nodding Disease" que afecta a más de 4000 jóvenes en todo el país y ha matado a casi 200 en los últimos años. Esos son los verdaderos miedos que no dejan dormir hoy a los niños en Uganda, no Joseph Kony.
2) El LRA NO tiene 30.000 niños secuestrados, de hecho, sus fuerzas no llegarían quizás ni a los mil reclutados. La manera en la que "Invisible Children" lanza los datos da a entender que el LRA es un ejercito enorme, cuando en realidad esa cifra pertenece a la cantidad de niños que han sido secuestrados por Kony y sus secuaces en los veinte años que lleva existiendo este grupo. Como dije anteriormente, la mayoría de esos niños han escapado y crecido, algunos incluso forman hoy parte del ejército de Uganda como asesores en la persecución de Kony - no con mucho éxito que digamos.

Oh, la inocencia.

"Sabemos qué hacer. Aquí va ¿listo? Para que Kony sea arrestado este año, la milicia ugandesa tiene que encontrarlo. Para encontrarlo, necesitan la tecnología y el entrenamiento para rastrearlo en la espesa jungla. Es ahí donde los consejeros americanos entran. Pero para que los consejeros americanos estén ahí, el gobierno americano tiene que enviarlos. Ya lo han hecho, pero si el gobierno no cree que a la gente le importa Kony, la misión será cancelada. Para que a la gente le importe, tienen que saber. Y sólo sabrán si el nombre de Kony está en todos lados."
Ajá.

Muy bonito todo. Ahora lee esa declaración otra vez ¿Cuantas veces tienes que leerla/escucharla hasta que notes la ingenuidad y todo lo que está mal en ella?

Hagamos otra lista, parece que así me explico mejor respecto a esto:

1) El ejército de Uganda ya está buscando a Kony desde hace rato. Unos diez años, para ser más específica. A ellos se han unido los ejércitos de Sudán del Sur, la República Democrática del Congo y la República Central de África, los países a donde el LRA escapó tras dejar Uganda. Además, una división del ejército de Estados Unidos, AFRICOM, lleva varios años asistiendo al ejército de Uganda, habiendo incluso estado involucrados en un intento fallido de ataque a Kony en 2008 que prometía matarlo o apresarlo y que resultó no solo en un gran fracaso, sino también en una serie de fuertes retaliaciones por parte del LRA, quienes se encargaron de destruir toda aldea que encontraran a su paso mientras escapaban de su escondite en la RDC, secuestrando a casi 700 personas y matando a unas mil entre enero y febrero de 2009.

2) El ejército de Uganda no sólo no está preparado adecuadamente, si no que es quizás tan malo como el LRA: Si bien este ha pasado diez años tras un grupo armado al cual sobrepasan inmensamente en número ( aprox. 35.000 vs. aprox. 900) son muchas las razones por las que no ha conseguido detenerlo como la corrupción interna - en 2003 se descubrió que los comandantes del norte del país no sólo inflaban los registros de las tropas gubernamentales, sino que se quedaban con los sueldos de casi 20.000 soldados registrados que en realidad se habían retirado, muerto o ni siquiera existían - la filtración de información al LRA por parte de quienes se supone son sus perseguidores, la falta de equipos, falta de entrenamiento, sueldos y hasta desnutrición de los soldados que lo conforman.

Teniendo en cuenta esto ¿quién garantiza entonces que estos ejércitos tomen de verdad en cuenta el entrenamiento que les proveerán los estadounidenses?

Además, las acusaciones que pesan sobre las tropas del gobierno de Uganda no son secreto para nadie y ellas incluyen violaciones, saqueos y asesinatos por doquier.

Puesto que esa idea que llena las cabezas de muchos y dice que a veces hay que "apoyar al menos malo" es para mí una real mierda en todo el sentido de la palabra, no, esta no me parece una solución válida.

3) Hasta ahora, ni Obama ni nadie ha amenazado con retirar a los consejeros enviados a África el año pasado. Es más, les pido por favor que si tienen alguna fuente o lo que sea que diga lo contrario me la pongan entre los comentarios o me la envíen a mi correo.

4)  En el hipotético caso que toda esta estrategia sea exitosa así de fácil y Kony sea detenido este  mismo año ¿qué va a pasar después? ¿no han pensado en la historia de terribles retaliaciones que el LRA ha tenido tras cada uno de los intentos fallidos por capturar a Kony? ¿quién se va a encargar de arreglar o prevenir ese problema?

5) Una de las razones por las que ha sido tan difícil llegar a Kony es porque sus guardaespaldas son niños. Esos mismos niños secuestrados, a quienes les han lavado el cerebro por años, son los encargados de protegerlo.

Digamos que la estrategia es eliminar a la LRA por completo de un sólo tiro, con un ataque aéreo, por ejemplo. Esto significaría tener que herir y matar a cientos de niños que no pasan de los 16 años y en esa situación no son muchos los que se atreven a precipitarse.

A esta lista podría agregar muchas más cosas. Algunos de los críticos se preguntan ¿para qué exactamente utiliza "Invisible Children" el dinero que piden que les donemos? y es ahí cuando entran los reclamos respecto a la claridad de sus estados financieros. Otros agregan que es el típico paradigma del "blanco salvador", en el que por la simple razón de hacer RT o hablar al respecto el occidental privilegiado alivia un poco esa culpa en su subconsciente respecto a lo que pasa en África, creyendo que con esa simple acción es suficiente para parar el problema.

Todas estas críticas y opiniones son perfectamente válidas, así como la manera en la que "Invisible Children" se ha defendido de ellas, pero yo no me quiero meter ahí.

Mi punto es  que las soluciones que esta campaña ofrece no sólo son bastante cuestionables sino también ingenuas, que aunque sus intenciones son buenas, y el trabajo que Invisible Children, la fundación, está haciendo es admirable, queda demasiado camino por recorrer y demasiadas cosas que aprender y mejorar antes de afirmar que esos planes que proponen son los que verdaderamente van a llevar a Kony a la justicia.

¿Qué solución ofrezco? No lo sé, mis conocimientos respecto a este tipo de temas son demasiado básicos como para ponerme a hablar de soluciones y estrategias. No pongo nunca en duda que se debe hacer algo y que el problema debe hacerse visible ante las masas, lo cual "Invisible Children" ha conseguido. Espero, de verdad, que una vez que el mundo sepa lo que pasa con Kony se genere un debate lo suficientemente fuerte como para que el verdadero remedio salga a la luz por parte de mentes más expertas que la mía y la de Jason Russell.

No hay comentarios:

Publicar un comentario